14-08-2017

Cómo analizó el oficialismo los resultados locales

El día después de la elección en Quilmes, varios dirigentes locales de Cambiemos analizaron los números finales obtenidos en cada punto del distrito.

Sin mostrar caras de preocupación alguna, coincidían en que el porcentaje de tres puntos favorables a Unidad Ciudadana, se obtenía de la sumatoria de los votos de las tres listas que se presentaron dentro de ese espacio.

“En el mano a mano le sacamos diez mil votos a la lista de Aníbal Fernández. En octubre serán muchos más”, repitieron casí al unísono. Hacían referencia a la lista que obtuvo el triunfo dentro de la interna y que será la que enfrentarán en las elecciones generales.

Asimismo estimaban que una buena parte del electorado que votó en esa interna y perdió, sumado a los “heridos” de la interna de Randazzo y a un porcentaje de votantes de Massa, finalmente en octubre eran los que se inclinarían por su sector.

SIN CAMBIOS EN LA ESTRATEGIA
En cuanto a la estrategía electoral de cara a lo que viene, se confirmó que no tendrá grandes cambios: Martiniano Molina será quien siga al frente de la campaña, y será quien seguirá con una fuerte presencia en las recorridas por los barrios del oeste profundo. Esos barrios que ya recorrió y donde el voto le fue esquivo.

"Son barrios que no han tenido el nivel de obras que si tuvieron otros puntos de la ciudad, aunque están contemplados para el año próximo", mencionaron.

“La estrategia será la misma: somos lo nuevo, no mentimos, y ponemos la cara; eso el vecino lo valora”, cuentan dentro del oficialismo. Y es esta premisa la que seguirá adelante de acá hasta octubre buscando sumar la confianza que de aquellos que no acompañaron en este turno electoral.

En el medio, es un hecho que la “agresiva” política de bacheo y arreglo de calles que desde hace años no se reparan, seguirá adelante, junto con la apertura del segundo bajo vías que tendrá Ezpeleta.

LA BUENA IMAGEN DE MOLINA Y CIA
A eso hay que añadirle que Molina junto a sus candidatos a concejales y principales funcionarios, no responden a dirigentes que participaron de gobiernos anteriores, por lo que no reciben reproches de promesas incumplidas.

Habrá que esperar hasta la próxima apertura de urnas para finalmente conocer si el sector de Molina logrará revalidar su gestión, y alcanzar así un número cercano a los 150 mil votos que logró cuando fue elegido intendente.