Con dos contragolpes letales, Quilmes derrotó 2 a 0 a Gimnasia y Esgrima de Jujuy como visitante por la fecha 35 de la Zona A de la Primera Nacional.

El equipo dirigido por Sergio Rondina llegó a los 53 puntos y quedó como único tercero en la tabla de posiciones, en una actuación que destacó por la efectividad frente a un rival que dominó la posesión pero no supo concretar.

El arranque del encuentro mostró a un Gimnasia que asumió el control de la pelota y jugó prácticamente en campo cervecero. Los locales intentaban abrir el marcador, pero chocaban constantemente con una defensa de Quilmes que se mostró sólida y bien organizada.

El conjunto jujeño intentó por medio de remates de media distancia, pero no lograba incomodar al arquero cervecero.

El equipo de Rondina, fiel a su planteo, se replegó y esperó pacientemente una oportunidad para salir de contraataque. Esa oportunidad llegó en el cierre de la primera mitad. En el minuto 47, Quilmes aprovechó un rápido contragolpe que comenzó con Leandro Allende, quien cedió para Emanuel Herrera, que a su vez devolvió de primera para Allende. El volante quedó mano a mano con el arquero Joaquín Bigo y definió cruzado para poner el 1 a 0 en favor de Quilmes.

Un golpe inesperado para Gimnasia que, pese a su dominio, se fue al descanso abajo en el marcador sin haber podido generar peligro real.

En el complemento, Quilmes salió al campo con una variante obligada. Matías Ferreira ingresó por Ayrton Sánchez, quien sufrió un golpe en la cabeza. Gimnasia salió con más agresividad en busca del empate, pero el Cervecero mantuvo su postura defensiva.

La primera jugada clara del local llegó recién a los 11 minutos, cuando Cristian Menéndez cabeceó un centro de Emiliano Endrizzi y la pelota rozó el travesaño.

Sin embargo, cuando Gimnasia empezaba a apretar, Quilmes volvió a golpear de contraataque. Apenas un minuto después del susto, a los 12, los de Rondina liquidaron el partido. Enzo Kalinski armó la jugada y habilitó a Ramiro Martínez, quien de primera cedió para Lautaro Parisi. El delantero sacó un bombazo al ángulo izquierdo que dejó sin chances a Bigo y selló el 2 a 0.

Quilmes siguió sufriendo bajas por lesiones. A los 16 minutos, Damián Adín fue reemplazado por Ramiro Martínez, mientras que a los 20, Emanuel Herrera dejó su lugar a Tomás González. A pesar de los cambios, el equipo visitante supo controlar el partido con una defensa firme.

En los minutos finales, Gimnasia buscó con más corazón que fútbol acortar distancias, pero la falta de precisión en los últimos metros y la sólida actuación del fondo cervecero frustraron todos sus intentos. El árbitro dio el pitazo final y decretó una victoria clave para los de Rondina, que sumaron tres puntos importantes de cara a la recta final del torneo.

Con esta victoria, Quilmes alcanzó los 53 puntos y se posiciona como único tercero en la Zona A de la Primera Nacional. El equipo de Rondina ha demostrado que, a pesar de no ser el más dominante en cuanto a posesión, puede ser letal cuando se le presentan los espacios.

La próxima fecha será fundamental para consolidarse, ya que recibirá a Deportivo Maipú de Mendoza en el Centenario, un partido que promete ser determinante en la pelea por la claificación al Reducido.

El Cervecero sigue soñando con el ascenso, apoyado en un equipo que sabe cuándo golpear y que, con cada partido, refuerza su identidad táctica.