Un trágico hecho tuvo lugar este jueves al mediodía en un comercio ubicado en avenida Calchaquí y Andrade, Quilmes Oeste, donde Marcelo Montero, de 58 años, se disparó en la sien luego de una discusión con inspectores municipales durante un control de habilitación.

Según fuentes policiales, Montero era el dueño del local y había recibido la visita de dos inspectores de Fiscalización y Control del municipio. Durante el procedimiento, surgió una discusión entre el comerciante y los funcionarios. En medio de la tensión, Montero extrajo de sus ropas una pistola “BERSA Mini Thunder” calibre 9 mm y se disparó a la altura de la sien, cayendo al suelo dentro de su local.

Personal policial llegó rápidamente al lugar y encontró a Montero en estado crítico. Fue asistido por una unidad del SAME que lo trasladó de urgencia al hospital de Quilmes, donde más tarde falleció como consecuencia de la gravedad de la herida.

En la escena también se presentó la fiscal Curra Zamaniego, quien ordenó las primeras pericias e inició una investigación para determinar las circunstancias exactas del suceso. La pistola utilizada por Montero fue secuestrada, y se están revisando imágenes de cámaras de seguridad y declaraciones de testigos para esclarecer los hechos.